• Basta un reservorio instalado a una altura mínima de 1,5 metros
para garantizar un riego eficiente,
• Aumentos en los rendimientos,
• Mejora la distribución de agua y fertilizantes,
• Reduce el trabajo manual,
• Reduce la evaporación y el flujo,
• Reduce el crecimiento de las malezas,
• Elimina el mojado del follaje, reduciendo los hongos y las
enfermedades.